De delicado color rosa y tacos altos, cada uno de esos zapatitos ostentan un gran zafiro en forma de corazón. Son dignos de una princesa.
Hasta ahí todo bien. A la bella, sólo le falta el castillo y su príncipe azul -- en unos 15 años, claro. Pero, lo que sigue deja a la pequeña a la altura y categoría de una de las tías feas de Cenicienta: medias tres cuarto celestes con la inscripción "Jump Sports Active" (posiblemente recibidas en herencia de algún príncipe mayor), pijama con motivos de semáforos y camperita polar rojo chillón.
Creo que las princesas posmodernas están perdiendo el glamour.
A una princesita como Meli, se le puede perdonar el look "tía de Cenicienta". Ya lucirá sus tacones con ropa acorde a la jerarquía real. Queremos una de cuerpo entero!!! Besos y más besos para todos.
ResponderEliminarLos abuelos Bonavetti.