viernes, 31 de octubre de 2008

Momentos de esparcimiento.

Mati jugando al "Mister Sabio"

Mati y Meli, luego de la iglesia.


El facherito.


O les sacaba una foto o nadie me creía...

jueves, 30 de octubre de 2008

Gran aplauso, gran.

¡¡¡UN FUERTE APLAUSO PARA
EL BONA,
NUESTRO VISITANTE # 5.000!!!

¡GRANDE, PA!

Genetista se busca.

Si por alguna de esas casualidades algún genetista está leyendo esto, le pido su ayuda. Considerando los grandes avances que se han logrado en ese campo en los últimos tiempos, creo que mi pedido no será tan descabellado.
Si han logrado hacer un mapa del genoma humano, supongo que podrán identificar un gen en particular. El gen en cuestión es el que hace que todo ser masculino se resista sistemáticamente a sentarse a la mesa cuando se le avisa que la comida está lista.
Una vez identificado, sugiero su pronta eliminación. Ya es muy tarde para mi (y para el 99.9% de las mujeres de este planeta), pero estoy segura que la próxima generación estará más que agradecida.
Esta cuestión de resistencia va más allá de la bronca que le puede dar a una el hecho de ver como se enfría la comida que (¿con tanto esmero?) se preparó. Es también una pérdida enorme de tiempo. Personalmente me he tomado un tiempo extra para cronometrar la situación. Salvo alguna rarísima excepción, el lapso que va desde el primer llamado a comer (en tono alegre, cariñoso) hasta el 5° o 6° en que el susodicho llega (cabe aclarar que el tono del llamado ya no es el mismo…) puede ser de un promedio de 7 a 10 minutos.
Esto no sólo se aplica a esposos, sino también a padres, hermanos, suegros e hijos varones. (He visto alguna excepción en novios, sólo cuando la que llama es la media naranja…  )
Y bueno, volviendo al pedido: espero que este gen realmente exista. Si no fuera esta la razón de tan extraño comportamiento, las opciones resultantes no son tan optimistas… (y que cada cual lo interprete como quiera).
Saludos a todos, y en especial a todas esas mujeres que sufren esta situación día a día…

miércoles, 29 de octubre de 2008

Vamos por las 5.000

Gracias a sus pasaditas, estamos por llegar a las 5.000 visitas al blog.
Me encantaría saber quién es el # 5.000, así que si me hace la gauchada, me lo deja en los comentarios.
Esto es pura y exclusivamente para satisfacer mi curiosidad. Como mencioné en otra oportunidad, que el agraciado no espere recompensas... (por lo menos materiales).
Besos y buen día.

martes, 28 de octubre de 2008

¿Sugestionada yo?

Los que han visto House, saben que un simple dolor de cabeza nunca es una migraña, o que un dolorcito de oído nunca es una mera infección local. Un paciente que llega con una uña encarnada puede ser finalmente diagnosticado con (y maravillosamente curado de) una terrible malformación congénita en los testículos.
Luego de ver tanta cosa complicada, uno termina un poquito sugestionado, así que cuando me levanté esta mañana con un fuerte dolor en el abdomen y dolor de cuerpo generalizado (cosas que uno no suele experimentar juntas), mi cabeza empezó a dar vueltas…
Estuve todo el día en cama (y eso me valió mi primera ausencia a clase del año). Goldy estuvo igual ayer (así que descarten embarazo, como ya me dijeron por ahí).
Pero bueno, luego de tanta especulación me quedo tranquila porque cada vez que nuestro benemérito Dr. House hace alguno de sus diagnósticos diferenciales empieza diciendo que:
“NUNCA ES LUPUS”.
Me voy a dormir tranquila, entonces. Hasta mañana.

lunes, 27 de octubre de 2008

Hablando de libros...

Esta es una foto de los libros que recibí de regalo (o "de arriba") el finde. No me pregunten muy bien como fue la cosa, pero lo que se es que los conseguí por un contacto de mis suegros.
Todos son para enseñanza de idiomas y hay cosas muy buenas. De los 130 que había en Inglés me quedé con 49. El resto, lo repartí.
Hay una buena tanda en Francés y otro poco en portugués, italiano y español.
Tengo para entretenerme... Y si me aburro, todavía tengo los 4 míos en California... jejejeje.
Saludos.

Llamado a la solidaridad.

Tengo 4 libros varados cerca de Los Angeles (CA). Antes de ver si me los envían por correo les pregunto a ustedes si saben de alguien que venga para acá y me los pueda alcanzar.
Así que largo el pedido por este medio para ver si alguien me pasa algún dato.
¡Gracias!
 
Titi

domingo, 26 de octubre de 2008

El que no salta no come gallina.

¿Se acuerdan de las gallinitas? No. No me estoy refiriendo despectivamente a los plumíferos rojiblancos que han quedado – con justa razón – en el olvido. Estoy hablando de las golosinas; de esos diminutos vasitos de helado con un copete de azúcar arriba y juguito de color y sabor artificialoide adentro que comíamos cuando éramos chicos.
Hoy pasé por un quiosco y las vi. No pensé que se seguían haciendo. ¡Qué emoción! Verlas fue un flash al pasado.
Al toque entré al negocio y compré algunas. La idea era comer una yo y luego llevarle a los gordos para que las probaran. “¡Qué lindo!” pensé. “Mis hijos saboreando las mismas golosinas que yo saboreaba a su edad.”
Pero eso nunca ocurrió. Una vez que abrí el primer paquetito, fue mi perdición. NO pude ejercer ningún tipo de auto-control y en el tiempo que me tomó llegar a la esquina, cruzar la calle y llegar hasta el súper, la bolsa estaba vacía.
Llegué a casa no sin bastante cargo de consciencia por haber privado a mis hijos de sus golosinas. Semejante grandulona…
Pero luego que Mati volvió de un cumple con una bolsa lleeeeeena de caramelos, chupetines y alfajores y no quiso convidar ninguno, todo vestigio de culpa llegó al FINAL DE LA LISTA (¡¡¡igual que las otras gallinitas!!! Jua, jua, jua)de mis preocupaciones.
Saludos y buena semana para todos.

viernes, 24 de octubre de 2008

Una señorita muy aseñorada

En ocasiones anteriores les conté de ciertos personajes que viven con nosotros (como el Sr. Presupuesto Familiar) y de otros que visitan cada tanto (Sra. I.). Hoy, les voy a contar de uno de éstos últimos.

Ella es una señorita de hábitos amables y de pocas palabras. Siempre ha sabido hacerle frente a la vida y nunca le ha reclamado nada. Sabe contar hasta 10 (o más si hace falta) antes de hablar o actuar frente a una situación que atiente con sacarla de su eje. Todos ansían estar en su compañía, pero no todos saben cómo hacerla sentir a gusto.

Paradójicamente, y muy en contra de su naturaleza, está mostrando ciertos rasgos de debilidad de carácter. Al igual que un adolescente en pena, últimamente está muy rebelde. Esta mañana, por ejemplo, le rogué que se quedara. No quiso y NO QUISO. Se fue al ratito nomás de haber llegado. Nuestro diálogo fue más o menos así:

Titi: Che, quedate. Preparo unos mates y charlamos un rato. Pará que le digo a los gordos que se callen y pongo el agua.

Srta. Paciencia: No… no puedo.

Titi: Dale. Acabás de llegar. Le saco la moneda de la boca a Meli y nos sentamos. Justo ahora me vendría bien una charla con vos.

Srta. Paciencia: Mirá… te dije que ando apurada. Paso en otro momento.

Titi: Pero… últimamente me decís siempre lo mismo. Los gordos te extrañan. Miralo a Mati como quiere llamar tu atención trepando a la mesada. Pará que lo bajo…

Srta. Paciencia: (susurrando) … 8, 9, 10, 11, 12… 98, 99, 100…

Titi: ¿Pero qué hacés? ¿Ya te vas? / Mati bajate de ahí ahora. A-HO-RA, dije.

Srta. Paciencia: Te dije que me iba. Además, no quiero que me digan lo que tengo que hacer. Si no quiero, ¡NO QUIERO! Punto.

Titi: ¡Será posible, será!

La verdad que extraño que no venga tan seguido. Según me dijeron, el alboroto la está superando. ¿Raro, no? Viniendo de ella, digo…

Pero bue’, si pasa por la casa de alguno de ustedes, le dicen de parte mía que la espero.

Saludos a todos.

Otra tarde en el Pre-Delta

Fuimos con los Bona el lunes a la tarde. Goldy laburaba así que se lo perdió.
Lo pasamos muy lindo, pero lamentamos que los senderos estaban cerrados (no sabemos por qué -- no pudimos ver al guardaparque para preguntarle).
Acá, el testimonio gráfico.

miércoles, 22 de octubre de 2008

Aguante GMT -2.

Me encanta el cambio de horario. No veo por qué hay que hacer tanto escándalo.

El hecho de que no todas las provincias se hayan adherido es complicado. Lo entiendo. Pero si uno cuenta que aprovecha más el día, que cena a la “puesta de sol” y no se levanta “cuando ya amaneció”, creo que está muy bueno.

Para aquellos que se quejan y dicen: “Este cambio cansa un montón porque uno trabaja más”, les aconsejo: piensen en la hora que es y no en la que “en realidad debería ser”. No se fijen a qué altura está el sol si no en qué ángulo están las manecillas del reloj. Si llega la noche y les da sueño: VAYAN A DORMIR y no piensen: “Uy, son las 11, pero en realidad son las 10”.

Disfruten el día, gente. Dis-fru-ten.

Besos a todos.

martes, 21 de octubre de 2008

Todo en regla.

Al igual que Andrés, los Bona vienen una vez por mes. Mi viejo deja organizado su laburo y se vienen a visitarnos. Bueno, en realidad vienen a ver a los nietos y de paso, a nosotros. Este es un hecho al que ya nos hemos acostumbrado... jua, jua, jua.
Por lo general llegan un sábado y se vuelven un lunes. Los domingos es la historia de siempre: mamá que ruega por un día más y papá que "tiene que volver al negocio". Esta vez se quedan un par de días más.
Pero su regreso no dependerá tanto del laburo (hoy el Bona llamó para ver como iba todo) sino de ¡EL SERVICIO METEOROLOGICO! "Mañana va a llover, así que me voy el miércoles", dijo convencido el patriarca... Mamá ruega que llueva, truene y granice así se alarga la estadía.
Yo ya no digo nada; los disfruto hasta un
- "Flaca, prepará la valija que nos vamos" y un ...
- "Pero Toto, ya que nos quedamos tres días, ¿por qué no nos quedamos cuatro?"
- "Flaca, tengo que laburar. Prepará las valijas".

domingo, 12 de octubre de 2008

Phobos, phobia, fobia...

El otro día salió un artículo en infobae sobre las fobias de los famosos. Luego de reírme un rato de los miedos infundados ajenos, me puse a pensar y me di cuenta que yo también tengo lo mío (de locuras sin sentido y no de famosa, valga la aclaración).

Y bueno, si de fobias se trata, acá van las mías:

1. Herpetofobia: Fobia a los reptiles. Lo cual no es muy compatible con el “garto” que vive en el patio de casa y que ya empezó a hacer sus apariciones.

2. Insectofobia (o entomofobia): Fobia a los insectos. Muy general, y por ende muuuy abarcante. No me llevo con los insectos. Tampoco muy compatible con un esposo criado en Misiones. (¡NO sean mal pensados, que no lo estoy llamando “bicho”!) Es que allí hay insectos de todos los colores, formas y tamaños. Goldy se los conoce a todos; sabe si “pican” o no, si son venenosos, etc. Desde que nos conocimos quiere sacarme el miedo. No quiero desilusionarlo, pero es una causa perdida.

3. Politicofobia: Fobia a los políticos. Bue’… fobia es un decir. Pero, ¿quién no sufre de ésta?

3. Lygofobia: Fobia a la oscuridad. Tendrían que ver lo que hago si es de noche, Goldy no está, se larga a llover y yo tengo un tendal lleno de ropa. Es tristísimo, pero mi corazón va a mil, corro como loca – con movimientos cortos y descontrolados – y si siento algún ruido, en 3 zancadas estoy adentro.

4. Ophidiofobia: Fobia a serpientes. Y para los que preguntan, la cosa venía de ANTES que a Goldy lo picara la yarará.

Un análisis más profundo me hizo dar cuenta que sufro de otras aversiones, que tal vez por su rareza no están descriptas en ningún lado. Paso a detallarlas, sugiriendo nombres con la esperanza de que en algún momento lleguen a oficializarse.*

5. Lernerofobia: FO-BIA a Alejandro Lerner.

6. Chamuyofobia: Fobia a las excusas muy malas o trilladas como “No sabía que el parcial era hoy”, “¿De verdad era para entregar? No creo haber leído eso en las instrucciones”, o “Le prometo que estudié, sólo que ahora no me acuerdo”…

7. Plancharumfobia: Fobia a la plancha. También aplicable a el acto de planchar, al arte de planchar y a la tabla de planchar.

8. Despelotfobia: Obvio; fobia al desorden.

9. Fiyifobia: Fobia a los pescados, al olor a pescado y ¡A LAS SALIDAS DE PESCA!

La lista podría continuar, pero ya me da vergüenza. Espero que me cuenten de las suyas.

Besos a todos,

* ¡¡¡Sobre todo la descripta bajo el número 5!!!