sábado, 16 de enero de 2010

Los chicos SIEMPRE tienen la respuesta.

El sábado pasado me tocó contar la historia para niños en la iglesia. La que elegí hablaba de Laura, quién detestaba la lluvia pero disfrutaba de las manzanas del árbol de su abuela, del aroma del jazmín y de las tardes de juego en el arroyo. Su abuela le hizo ver que sin la lluvia que Dios enviaba, ella no podría disfrutar de esas cosas que tanto le gustaban.
Moraleja: hay cosas que pueden no gustarnos pero que en realidad son buenas.

Para introducir a los chicos en la historia, pensé que les haría preguntas acerca de cosas que (en general) no les gustan demasiado, para luego ver sus "lados positivos". En estos pensé:
- La oscuridad (al fin y al cabo, si no me gusta a mí, supongo que a los chicos tampoco).
- Las verduras
- Las moscas (que justo me estaban molestando DE-MA-SIA-DO)
- Quedarse quietito/a.
Por más que me devané los sesos, no pude encontrar una buena razón para la existencia de las moscas, así que acorté la lista y al terminar con el relato, fuimos a las "bonadades" de lo que no nos gusta.

Los "lados positivos" (recuerden que el público son nenes...):
- La oscuridad: dormir con el sol en los ojos sería muy difícil.
- Las verduras: hacen que nuestro cuerpo crezca fuerte y sano.
- Quedarse quietito: (en el templo) le dice a Jesús que somos reverentes y que lo queremos.

También les di como "tarea" (otra cosa que no gusta) que durante esa semana trataran de identificar cosas "negativas" y que hablaran con papá y mamá para tratar de ver si podían encontrar algo "positivo" en ellas.

Ahora, lo más interesante es que al día siguiente, Mati pidió hacer la oración por la comida. Fue algo un tanto extenso, donde dio gracias por MUCHAS cosas. Ya terminando dijo: "te damos gracias por las moscas...".

Debo reconocer que a esa altura mi mente se desconectó de la oración y en milésimas de segundos me pregunté: "¿qué le encontrará de bueno a las moscas? Yo no pude encontrar ni una cosa. ¿Con qué va a salir?"

Su última frase fue: "... porque las podemos aplastar".
Me dejó muda. Pero eso tiene su parte "positiva": en boca cerrada no entran moscas...
Tomá.

1 comentario:

  1. Este Mati no deja de asombrarnos con sus "salidas", y no es la primera vez que lo hace. Debo reconocer que sus reflexiones son siempre ¡GENIALES!! Bravo Mati!!! Besos de los abue de Tandil.

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