Anteanoche Mati durmió por primera vez en su cama. Ya se la habíamos armado hacia un tiempo, para que se “fuera acostumbrando a verla”. Mientras, seguía durmiendo en su cuna.
Goldy fue quién le hizo la baranda.
El gordo estaba bastante emocionado porque se quería acostar mientras yo ponía las sábanas. A la noche, luego de todo el “ritual” previo al “nonó” (ir a dormir), el solito se subió a la cama y se tapó!!!
Yo no podía creerlo. En su cuna, el simple roce de la sábana lo volvía loco, y acá, lo más campante!!!!
Lo mejor de todo: no se levantó ninguna vez. Eso sí: hoy salió de su pieza ni bien abrió los ojos (7:40am!!!). Nada saludable.
Hoy levantada fue más temprano y completamente inesperada. Goldy se levantó a las 7:00am y se lo encontró al gordo debajo de la mesa de la cocina. Me pregunto desde cuando estaba allí!!!
Lo que sí, con las siestas todavía no hay caso. Parece que eso no lo convence demasiado y se levanta mil veces (y por cansancio nuestro, termina en la cuna…)
Y bueno, es un gran paso el que está dando, y a pesar de la alegría que me da ver cómo se va desarrollando, también está el “no se qué” de ver que el tiempo pasa demasiaaaaaaado rápido!!!!!
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